Trust me I'm a... Goonie.

"Como molamos, ¿eh Javi?"- "Ni que lo digas tron"

El otro día vi No Country For Old Men y salí bastante satisfecho. Los mejores Coen, o sea los de los primeros filmes, están de vuelta. La película enseguida te evoca aventuras pasadas de los hermanos como Sangre Fácil (está rodada en los mismos parajes de Texas y Nuevo México) o Fargo, de la que tiene una atmósfera similar. La misma sensación de desolación cambiando la nieve por el desierto y personajes que salen de su particular rutina rural para enfrentarse a hechos inusuales y poco convencionales amén de asesinos excéntricos y/o descerebrados.
Y la pregunta del millón "¿cómo está Bardem?", pues bien, la verdad es que hace un buen papel.
De todas formas, sin querer desvirtuar su interpretación que me parece hecha a la medida del personaje, si decir que no sé hasta que punto es mérito suyo y hasta donde mérito de la dirección.
Porque la verdad es que es un personaje típicamente Coen, que supura su personalidad por todos lados.
También decir que es un papel muy goloso para los Oscars, a saber: trasformación física (como le mola esto la academia) y por supuesto estar encarnando a una suerte de tarado (otra de las cosas que se la ponen gorda a los repartidores de la apreciada estatuilla).
La verdad es que Bardem apenas cae en la sobreactuación (simplemente la típica en una peli de los Coen) y crea un villano para los anales... menudo cabronazo pirado.
Bueno, yo en realidad abría este post por el que es el actor de moda ahora mismo: Josh Brolin.
Joder con el tío, después de haber estado en el ostracismo durante lustros, va y se cuela en varias de las películas más interesantes del año pasado (alguna no pasó de eso, ser simplemente interesante a priori), como son: el proyecto Grindhouse de Tarantino-Rodriguez, American Ganster, la citada de los hermanitos Coen y In The Valley of Elah, donde vuelve a encontrarse con Tommy Lee Jones.

Los Goonies en la actualidad

Es de recibo recordar que Brolin fue el hermano mayor y cachas de los Goonies, además de coprotagonizar dos de las series más molonas de finales de los 80 principios de los 90. Estoy hablando, claro, de Detective Privado (Private Eye) donde encarnaba a un rockabilly ayudante de una especie de Philip Marlow (recuerdo especialmente de esta serie un cameo del enorme Chris Isaak) y la otra serie, con la que saltó al estrellato televisivo, Jovenes Jinetes.
Si hombre... aquella en la que salía un Baldwin... ¿cuál?, pues Steve el de Sospechosos Habituales y treinta millones de películas de videoclub (¿todavía existe eso?). Steve hacía de William Cody (el futuro Buffalo Bill) y Brolin de James "Wild Bill" Hickock (el futuro pistolero) y los dos trabajaban de carteros en el Pony Express (idea que más tarde maduraría Kevin Costner y desarrollaría en uno de sus proyectos post-apocalípticos más recordados The Postman, jojojo que tío este Costner).

¿Qué hará el mudito ahora?

Uff que me voy por las ramas, ya no se ni que estaba contando, con tanto paréntesis y dato irrelevante (no para mi).
Lo cierto es que Brolin en realidad nunca se marchó y siempre estuvo ahí. Y si repasamos su filmografía lo encontramos como secundarío en un buen puñado de pelis taquilleras.
Pero es evidente que desde los días de Jovenes Jinetes el actor no gozaba de tanta popularidad.
Nosotros, los Iones, nos alegramos por el y esperamos que esta racha le dure.
No me puedo despedir sin más y no decir también que este cabrón se tira a una de las musas (y Hot Babe) de Los Secuestradores De Iones, Diane Lane y no sólo eso si no que es su mujer desde 2004.

Si, es un tipo con gusto, para que lo vamos a negar:

Sí, le tenemos envidia. Para que lo vamos a negar también.