Edie (Ciao Baby)

Fragil, desvalida y a la vez dura y fria como el hielo. Su expresión ingenua e inocente como si tratase de ocultar un pasado trágico delataban un ser humano perdido. Dicen quienes la conocieron que era inalcanzable. Edie Sedgwick... la musa de Warhol e icono pop de los 60 dejó una huella imborrable en aquel New York sórdido y underground.
Quizá nunca llegó a encontrar lo que buscaba pero, en ella, muchos hallaron inspiración y claro para otros muchos también fue la perdición.
Perteneciente a una familia más que acomodada de Nueva York, Edie introdujo a Warhol en la alta sociedad de la gran manzana y durante un año se hicieron inseparables, ella incluso se cortó y tiño el pelo a la manera Warhol.
Se convirtió en la princesa de la Factory y a demás de ser la protagonista de los experimenteos audiovisuales de Andy se dedicó a follar como una bestia y a meterse todas las drogas que pudo.
Su caracter desequilibrado, algo que le venía de familia pues dos de sus hermanos se habían suicidado y ella misma había pasado por varías clínicas psiquiátricas, y su vida al límite fascinaron a numerosos artistas de la época.
Se dice que el Blonde on Blonde de Bob Dylan está inpirado en ella al igual que Breakfast at Tiffany's (desayuno con diamantes) de Truman Capote, título este que en su versión literaria es bastante más crudo pues la protagonista es bisexual y bastante más putilla que Audrey Hepburn en la gran pantalla.
A Capote le hubiera gustado que la protagonizara Marylin Monroe pero ésta estaba intentando dejar atrás su imagen de chica frívola y no aceptó.
El caso es que nuestra Edie tenía sin duda rasgos en común con las dos actrices, la sensualidad y actitud provocativa que exhibía la Monroe también tras un velo de ingenuidad y el porte elegante y aristocrático de la estilizada figura de Hepburn. Bueno y que era una tarada pastillera como Norma Jean.



Dicen que estaba locamente enamorada de Dylan y aunque se ve que nunca fueron amantes ella se creia algo así como su novia aunque eso no le impedía tirarse a Bobby Neuwirth, colega intimo de Dylan. Veamos que tiene que decir Edie al respecto:
"Aprendí mucho sobre el sexo con él. Hacer el amor, amar, dar. Era su escalva sexual. Podia follar durante 48 horas, otras 48, otras 48... sin cansarme. Pero cuando me dejaba sola me sentía vacía y me ponía a tomar pastillas sin control"
Parece ser que fue una auténtica devoradora de hombres a los cuales utilizaba a su antojo incluso cuentan que en ocasiones le proporcinaban acompañantes sólo para que no pasara la noche sóla, algo que la horrorizaba y le hacía utilizar evasión quimica.
La Velvet Underground le dedico un tema de su famoso álbum del plátano: Femme Fatale

Aquí viene ella
Será mejor que tengas cuidado
Ella va a romper tu corzón en dos
De verdad
No es difícil de adivinar
Sólo mira sus ojos coloreados falsamente
Ella te levantará sólo para dejarte caer
Qué payaso
Porque todo el mundo sabe (ella es una mujer fatal)
Lo que ella hace para agradar
Es sólo un pequeño tormento
Mira cómo anda
Escucha cómo habla

Estás apuntado en su agenda
Eres el número 37, echa un vistazo
Te sonreirá para hacerte enfadar
Qué payaso
Nene, ella viene de las calles
Antes de que empieces ya estás vencido
Ella jugará contigo como un bufón
De verdad

Cuando Dylan se casó, parece que a Edie se le fue la pinza aún más si cabe y se largó de la Factory.
Adicta a la heroina y las pastillas el útimo tramo de la vida de Edie Sedgwick es un calvarío. Realiza algún trabajo como modelo para Vogue pero deciden no contar más con ella por su pinta enfermiza y la leyenda de drogata que la acompaña. (algo así como a Kate Moss sólo que a la Moss le han llovido las ofertas).
Tambien protagoniza una especia de película autobiográfica, Ciao! Manhattan. Título que a la postre será clarividente.
Edie tras recibir terapia de electroshock en varíos centros se casará con un paciente que conoce en alguna de sus estancias en los sanatorios. Y meses más tarde diría su adios definitivo a Manhattan con un cocktail mortal de barbitúricos, aumentando así su halo de mito y su caracter de icono para siempre jamás.
Parafraseando la canción que le dedicaron los Cult, en su disco Sonic Temple:

"Why did you kiss the world goodbye? Ciao Baby"