Cuando la cancha se convierte en un ring: Bad boys vs Jordan

Los Secuestradores de Iones nos sumamos a la iniciativa abierta por los Littlefrank con sus maravillosas 'retro-crónicas' deportivas de los ochenta (pinchad aquí para leer el top ten de los partidos de Drazen) y os ofrecemos un interesante artículo sobre lo duros y chungos que eran los Detroit Pistons de finales de los 80 (época gloriosa en todos los aspectos de la vida: desde Perico a Guns n' roses).




Los de Detroit eran apodados 'Bad boys', por sus métodos...mmm... er... contundentes... llegaron a ganar dos títulos y el bueno de Jordan ( que era una superestrella pero no ganaba nada nunca) cada vez que tenía que jugar contra ellos las pasaba canutas, y se lamía las heridas como un maldito perro callejero apaleado...

Siempre habían saltado chispas en los enfrentamientos entre los Bulls de Jordan y nuestros amiguetes 'duros' de Detroit, pero es en enero del 88 cuando el asunto llegó a su punto álgido.

Es en estos enfrentamientos cuando las acciones pasaron de ser un simple juego fuerte para caer en la violencia, según Jordan existía "mala intención" en las formas que los jugadores de Detroit, Rick Mahorn y Adrian Dantley utilizaron para controlar su juego.


Aquí Rick Mahorn en su época con los Sixers 'saludando' a Mike



Según un indignadísmo Jordan "trataron de lesionarme de forma intencionada, no tengo la menor duda en mi mente de tal realidad".

Jordan, en cierto momento del partido fue hábilmente cogido por el cuello y tirado al suelo por Rick Mahorn, acción que provocó una tangana bastante buena, con mucho barullo y puñetazos de negro, de estos que molan.

Mahorn fue expulsado y Charles Oackley, compañero de Jordan que salió en su defensa, también.


Rick Mahorn pidiendo la hora al árbitro.

El bueno de Ricky Mahorn, minutos antes,con la vena de la sien hinchada, había empujado de forma violenta al entrenador de los Bulls (por aquel entonces Doug Collins), haciendo que éste se chocase contra la mesa de anotadores y ,muy probablemente, se cagase en los calzoncillos.

Doug Collins tras el partido y ya con una muda limpia declaró que "la violencia de algunos jugadores debe cortarse radicalmente, para no caer en situaciones peligrosas para la integridad física de las grandes figuras", bien dicho Doug ,eso está muy bien, hay que proteger a las grandes figuras, a los jugadores mediocres que les zurzan.

Al final del partido, Adrian Dantley volvió a golpear con dureza y precisión a Air Jordan en mitad de uno de sus vuelos, Jordan se pegó un buen costalazo y acto seguido entró al trapo.

Ambos jugadores se intercambiaron golpes e insultos que aquí no vamos a reproducir porque los insultos así escritos no tienen gracia. Jordan,erre que erre en sus declaraciones vuelve a hablar de "intención deliberada de hacer daño".



En el instante del último tiro de la carrera de Jordan, éste pensó en Ricky Mahorn


Los 'Bad Boys' tienen otra visión de las cosas y de lo sucedido, y afirman que Jordan como figura que es, debe aprender a recibir golpes y caer al suelo,que no sea nenaza, nuestros chicos malos preferidos no se andaban con chiquitas.

Ellos eran auténticos tipos duros y así lo demuestran las sarcásticas declaraciones de Dantley: "Si piensa que nadie puede tocarle está muy equivocado. Cuando yo era lider de los encestadores en la liga, cada noche tenía que estar preparado psiquica y físicamente para recibir ostias, muchas veces más graves que las que recibe Jordan".



Isiah Thomas (11) a punto de chafarle el balón en la cara a Air Jordan


Los Pistons son unánimes en lo que se refiere a Jordan: "Cuando hace jugadas espectaculares todo el mundo es feliz, pero cuando se trata de pararle, todo es polémica".

Si es que en realidad eran unos incomprendidos, los angelicos... angelicos negros de más de 2 metros, que si te conectan un buen guantazo te matan, y si intentas huir te pillan porque corren más que tú...

Ricky Mahorn rules!

este artículo es una respuesta a la dedicatoria que se me ha hecho desde los littlefrank, así que eso, dedicao para Chevi y para todo aquel que goce con el basket, o con las historietas de follones.